¿Cómo sabemos si un perro tiene un problema en las articulaciones? Como sabemos, el perro no puede hablar, pero su cuerpo sí: – Rigidez en los movimientos. – Dificultad para levantarse o caminar después de descansar. – Disminución de los niveles de actividad y movilidad reducida. – Muestra irritabilidad al palpar la zona articular afectada. – Cojear. – Reducción del apetito. Como siempre, el veterinario es la mejor alternativa para evaluar la salud de nuestro perro y diagnosticar patologías como artritis, displasia de cadera o codo, osteocondritis, etc. Además, el sobrepeso puede derivar en problemas y dolores articulares con el paso de los años.
Sin embargo, puedes prevenir algunas complicaciones si cuidas la salud de tu mascota desde una etapa temprana: ajusta la actividad de acuerdo a su raza y condición, cuida una dieta sana y adecuada y, complementa su alimentación con un suplemento especial como MOOIZA flex para fortalecer y proteger sus articulaciones y su movilidad. ¡Cuida a tu mejor amigo para que tenga una vida de perro larga y saludable a tu lado!