Si a tu vida acaba de llegar un cachorro (o perro joven), entenderás que le queda bastante por aprender. Sin embargo, el crecimiento de tu cachorro no solo es mental y para acostumbrarse a su nueva familia, sino también físico, ya que crecerá rápidamente y requerirá los nutrientes (proteínas, minerales y vitaminas caninas) necesarios y actividad física apropiada para un desarrollo sano y adecuado.
En este artículo, queremos hablarte sobre los ejercicios físicos apropiados para tu cachorro y los que deberías evitar.
Por qué es importante cuidar las articulaciones de tu cachorro
Cuidar las articulaciones de tu cachorro es importante porque estas estructuras óseas son responsables de permitir todo el movimiento y la flexibilidad de su cuerpo. Durante la etapa de crecimiento de un perro, las articulaciones y huesos están en todavía sin desarrollar por completo y son especialmente vulnerables a lesiones o deformidades que pueden perjudicarle durante toda su vida.
Un ejercicio físico inapropiado o excesivo a una edad temprana puede ejercer una tensión indebida en las articulaciones de tu cachorro, lo que puede provocar daños permanentes, dolor o problemas de salud en el futuro. Por ejemplo, correr o saltar en exceso puede desgastar el cartílago de las articulaciones, lo que puede causar artritis y dolor articular en el futuro.
Además, los perros de raza grande tienen una mayor propensión a desarrollar problemas articulares como displasia de cadera o displasia de codo debido a la carga que soportan sus articulaciones durante su crecimiento (suelen crecer rapidísimos y coger peso sin tener su aparato locomotor desarrollado de todo).
Por estas razones, es importante que los cachorros realicen una actividad física adecuada y controlada por sus dueños que les permita desarrollarse de manera saludable y fortalecer sus músculos y huesos, sin poner una tensión indebida en sus articulaciones y su cuerpo. De esta manera, podrás ayudar a tu cachorro a tener una vida activa y saludable en el futuro, evitando problemas articulares y otras complicaciones de salud.
Ejercicios recomendados para tu cachorro
- Paseos: cuando tu cachorro haya recibido todas sus vacunas y puedas llevarlo a explorar el mundo, es recomendable hacerlo sin forzarlo. Cuanto más joven sea, más descanso necesitará, así que haz paseos cortos y nunca lo obligues si lo notas cansado. En lugar de hacer uno o dos paseos largos, es mejor hacer varios cortos de 20 minutos o media hora a un ritmo lento. Para el cachorro es importante explorar su entorno de forma segura y a su ritmo. Aunque te apetecerá llevar tu pequeño a todas partes contigo, piensa bien si de verdad es adecuado para él o si esta mejor en casa, descansando un rato.
- Juegos con otros perros (preferiblemente cachorros): jugar contigo es la mejor forma de mantener a tu cachorro activo y también aprenderá el autocontrol y a interactuar con su familia correctamente. El juego puede ser con pelotas, discos, cuerdas o los juguetes caninos que tengas en casa. Lo importante es la actividad conjunta, tirar el juguete, traértelo, soltarlo, esperar que le permitas cogerlo, etc. Es un doble estímulo, mental trabajando la autodisciplina y las «reglas» básicas de conducta y la actividad física.
- Natación: es un excelente ejercicio para fortalecer los músculos y entrenar el cuerpo sin impactos perjudiciales. Si tienes la oportunidad de llevarlo a algún sitio donde pueda nadar, es fenomenal. Como siempre, sin forzarlo ni excederte para evitar malas experiencias además de tenerlo controlado en cada momento para evitar sustos o accidentes. Es un cachorro y hay que ser consciente que es un todavía un animal joven, inconsciente de posibles peligros.
Ejercicios que NO debes realizar con tu cachorro:
- Aunque seguramente te apetezca, no lo lleves a caminatas largas durante los primeros 6-8 meses ni a hacer deportes (intensos) contigo. En los meses de verano debes tener aun más cuidado y bajar la actividad física además de llevar siempre agua en los paseos para refrescarle.
Por ejemplo, llevarlo a correr o junto a la bicicleta. Su cuerpo aún no está desarrollado y, especialmente, sus articulaciones sufren un sobreesfuerzo y le pueden causar daños permanentes. Para un ejercicio físico intenso, es recomendable esperar hasta que cumpla el primer año de edad y, si es un perro de raza grande (como un labrador o un pastor alemán), incluso hasta los 18 meses cuando su cuerpo ya esté completamente desarrollado y sus articulaciones “soldados”.
- No lo dejes realizar grandes saltos o impactos bruscos. Recomendamos que lo levantes y lo bajes del coche en brazos y evites que suba y baje por las escaleras en exceso. Este movimiento puede ser dañino para sus articulaciones, huesos y tendones que aún no se han desarrollado completamente. Además, los cachorros a menudo no saben medir bien las alturas o los riesgos, y debes ayudar a prevenir accidentes y lesiones. Un pequeño esfuerzo por tu parte puede evitar lesiones y, desde luego, es mucho mejor que tener un perro joven en reposo o con escayola.
- No lo dejes jugar con otros perros sin supervisión. Pueden surgir situaciones de conflicto que tu perro no sabe manejar o un juego muy brusco donde puede salir lesionado. Estate atento para intervenir si notas que el juego se vuelve demasiado para el pequeño (tampoco te preocupas demasiado, los perros generalmente saben interactuar bien con cachorros y tu perro no se va a romper por un pequeño revolcón).
Otras recomendaciones
Además de los ejercicios recomendados y los que se deben evitar para los cachorros, es importante mencionar que cada perro tiene sus propias necesidades y limitaciones en cuanto a su actividad física. Algunos cachorros pueden ser más activos que otros, y otros pueden tener problemas de salud que limiten su capacidad para hacer ejercicio desde una edad temprana.
Por lo tanto, es importante observar y conocer a tu perro y adaptar el tipo y la cantidad de ejercicio que le proporcionas en consecuencia. Siempre es recomendable consultar con tu veterinario antes de comenzar un nuevo régimen de ejercicio para tu cachorro, especialmente si tiene alguna condición médica o ha sufrido una lesión previa. Además de los veterinarios, los adiestradores caninos pueden ser grandes consejeros para recomendarte actividades y ejercicios para tu peludo.
Por último, recuerda que el ejercicio físico adecuado para tu cachorro no solo promueve su salud física, sino que también ayuda a fortalecer el vínculo entre tú y tu mascota, lo que permite conoceros, crear confianza y tener un impacto positivo en su bienestar emocional y mental.